5 estrategias efectivas para mejorar la adherencia terapéutica

En el año 2003, la OMS estableció los siguientes criterios para medir el grado de adherencia de un paciente:

• • Toma de la medicación 
  • Seguimiento de una dieta
  • Modificación de los hábitos de vida

Sin embargo, estudios recientes apuntan que deberíamos tener en cuenta también otros puntos. En este post te explicamos el peso de la adherencia durante el tratamiento, y qué debes tener en cuenta.

¿Por qué es tan importante asegurar la adherencia terapéutica?

Antes de nada, debemos comprender por qué es tan importante seguir correctamente la medicación. Según Pfizer, la adherencia al tratamiento se ha situado como un problema de salud pública a nivel mundial.

Tan solo el 50% de los tratamientos en enfermedades crónicas presentan adherencia terapéutica, número que desciende significativamente en países subdesarrollados.

La adherencia terapéutica repercute a distintos niveles sociales, económicos, y también sanitarios. Por ello, ya sea para nosotros o para un familiar, es importante tener en mente los siguientes conceptos:

• • Tomar la dosis correcta. Aunque tomemos la medicación, siempre debe ser en las cantidades adecuadas.
  • Régimen de distribución. Respeta los tiempos asignados para favorecer su eficacia.
  • Persistencia. No abandones el plan médico antes de tiempo.

¿Qué es la persistencia?

Ver resultados nada más iniciar un tratamiento puede resultar difícil. A menudo, empezamos un plan médico de larga duración con grandes expectativas, pero tras pasar un tiempo y no sentir mejoras notables, desconfiamos de su efectividad y no lo terminamos.

 

Solo uno de cada tres pacientes toman la medicación correctamente.

La persistencia mide el tiempo que decidimos dedicarle al tratamiento, desde el día que da inicio hasta que lo completamos. Si este periodo coincide con la duración que el médico nos ha prescrito, estaremos haciendo un buen seguimiento.

Aunque se trate de un aspecto básico, pocos son los pacientes que respetan la persistencia terapéutica.

Según Haynes y Scakett, reconocidos epidemiológicos y pionero de la Medicina basada en la evidencia, tan solo 1 de cada 3 pacientes toman la medicación correctamente. Otro tercio lo hace de manera ocasional e incompleta, y el resto deciden no iniciar el proceso.

¿Qué puede pasar si no sigo correctamente el tratamiento médico?

Se trata de una de las preguntas que los pacientes se hacen con mayor frecuencia. Suelen estar fundamentadas por la desconfianza al tratamiento, o por no conocer en detalle la enfermedad que pueden estar padeciendo.

Por supuesto, recomendamos siempre consultar estas dudas con tu médico y prescriptor, así como solicitar una segunda opinión profesional en el caso de necesitarlo.

De todos modos, existe una serie de variables que pueden verse afectadas de no involucrarse en el tratamiento de manera efectiva. Estas pueden ser:

• • Resistencia al tratamiento. Como puede darse en el caso de los antibióticos, su uso inadecuado puede comportar una menor efectividad en próximos tratamientos.
  • Mayor coste para el paciente, o la sanidad pública: volver a realizar pruebas médicas, extraer conclusiones y reiniciar un tratamiento no solo puede comportar un gasto económico, sino también de tiempo y calidad de vida.
  • Empeoramiento o avance de la enfermedad.
  • Intervenciones quirúrgicas y/o hospitalización en casos graves.

En definitivas cuentas, la falta de adherencia terapéutica puede comportar un empeoramiento de la enfermedad. Para evitarlo, te recomendamos que tomes nota de los puntos que te presentamos a continuación:

5 aspectos clave para reforzar la adherencia:

Existen una serie de factores que marcarán la diferencia entre una buena y una mala adherencia terapéutica.  

La enfermedad: La prevención siempre es la mejor cura. Ante sospecha de síntomas o antecedentes familiares, es recomendable acudir al médico periódicamente. También es importante hacer seguimiento a aquellas patologías propias de la edad, sexo o relacionadas con grupos de riesgo.

El paciente: Como pacientes, debemos sentirnos conformes con el tratamiento médico asignado. Comprender qué nos está pasando y por qué debemos actuar de determinada manera.

El fármaco: Debe tomarse siguiendo la pauta, ser asequible y seguir siempre las instrucciones del prescriptor.

El entorno: Debe facilitar que el paciente pueda acceder a su medicación.

El médico o prescriptor: Es importante tener la confianza de preguntar y solventar dudas con nuestro médico. De esta manera será más fácil conocer nuestra situación o la de nuestro familiar.

Tomar nota de estos puntos, y repasarlos uno a uno no solo nos ayudará con la adherencia terapéutica, sino que puede llegar a evitar una enfermedad grave.

¿Cómo lograr la adherencia terapéutica en el paciente?

Una vez sabemos qué aspectos reforzar, podemos encontrar diferentes metodologías para conseguirlo.

Servicios de preparación de la medicación: siempre será mucho más seguro que un farmacéutico organice nuestra medicación por tomas, y evitar así confusiones.